El Braco Alemán de Pelo Corto es un perro bastante apreciado por los cazadores. De gran inteligencia y con un olfato difícil de igualar, es un corredor incansable y todo terreno, realiza a la perfección el trabajo de rastreo y cobro de animales tanto de piel como de plumas, ya sea en agua como en tierra.
El Pointer Alemán de Pelo Corto es sagaz, jovial, inteligente, observador y obediente, aunque a veces puede ser un poco testarudo. Es fiel y muestra un gran apego hacia sus dueños. Le encanta jugar con los niños, es dulce delicado y paciente con ellos.
Los ancestros del Pointer Alemán de Pelo Corto provienen de los perros que, en el siglo XVI, los alemanes utilizaban como perro de muestra. Hacia el siglo XIX, la caza ya no era una cosa sólo de los ricos, y los pequeños propietarios rurales, que no podían mantener grandes perreras, se encargaron de desarrollar un perro polvalente. Del cruce de varios perros de muestra y de rastro nació el Braco Alemán, capaz de rastrear, mostrar y cobrar la caza tanto en tierra como en agua.
El Braco Alemán es esbelto, de dorso corto, pecho profundo y osamenta sólida. Su cabeza es larga y ancha y tiene unas orejas también anchas y de inserción alta. El pelo resulta corto y espeso y áspero al tacto.
El Pointer Alemán de Pelo Corto se adiestra con facilidad, el dueño tiene que imponerse y actuar con
autoridad pero sin ser muy duro.
Es un perro demasiado nervioso para vivir en un piso, no le
conviene estar encerrado. Disfrutará más viviendo en una casa de campo donde, regularmente, pueda hacer el ejercicio que necesita.
El Braco Alemán es un perro bastante resistente aunque se han dado casos de displasia de cadera, entropión, enfermedad de Von Willebrand y trombocitopatía. También puede padecer problemas oculares e infecciones de oído.
No encuentras lo buscas, prueba en este buscador
Mi compañero Txiki, con cuatro meses